El Paco MATA – y está ENTRE NOSOTROS…
“Un día alguien del grupo trajo un Paco y yo me fumé dos. Me pegó y quedé pila, sano, duro. Y así empecé, llegué a gastarme cien mangos en una noche. Porque es una droga que te pide mucho… te pide mucho. A veces cuando quedaba manija (colgado), porque no tenía moneda, me la daban igual pero si sos fisura (sin plata) te junan y te mandan a afanar”… “En dos semanas no servís para nada se te van las ganas de comer, de bañarte, de todo; quedas estúpido. En el barrio es un bajón ver a los pibes así. Tirados en las esquinas, descalzos, deformados de tanta porquería.
El Paco Mata a tu Hermano, a tu Amigo, destruye la Familia…”
Testimonio de un joven adicto al Paco en tratamiento.
La capacidad adictiva, y el poder destructivo de la sustancia, han transformado a sus consumidores más vulnerables en “Muertos Vivos” (Denominación para referirse a los adictos al Paco con mayor dependencia y compromiso fisiológico).
El Paco continúa intoxicando y Matando a nuestros niños y jóvenes, condicionando el futuro de nuestros Hijos, por el cual debemos actuar de inmediato: denunciando el Tráfico de estupefacientes y a los funcionarios que no cumplen con su deber, en la aplicación de la Ley en defensa de la Vida.
El Paco solo ha sido tratado como una crónica policial, donde los jóvenes y especialmente de los barrios carenciados de Capital Federal y de el Gran Buenos Aires, parecen prisioneros de una especie de maldición que los llevaría a consumir Paco, meterse en el delito y terminar matándose en unos meses, ya sea por efecto de la droga o en manos de las fuerzas policiales o de algún vecino partidario de la “justicia” por mano propia.
No te engañes, el consumo de Paco te come la cabeza y te Mata. Mientras los que te la venden disfrutan de tu dinero y tu desgracia.
Tu Salud y tu Vida valen, tu SER es ÚNICO e IRREPETIBLE.
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